Una novela de amor y espionaje en el exotismo colonial de África.
La joven modista Sira Quiroga abandona Madrid en los meses convulsos previos al alzamiento arrastrada por el amor desbocado hacia un hombre a quien apenas conoce. Juntos se instalan en Tánger, una ciudad mundana, exótica y vibrante en la que todo lo impensable puede hacerse realidad. Incluso la traición y el abandono de la persona en quien ha depositado toda su confianza. El tiempo entre costuras es una aventura apasionante en la que los talleres de alta costura, el glamur de los grandes hoteles, las conspiraciones políticas y las oscuras misiones de los servicios secretos se funden con la lealtad hacia aquellos a quienes queremos y con el poder irrefrenable del amor.
Una novela femenina que tiene todos los ingredientes del género: el crecimiento personal de una mujer, una historia de amor que recuerda a Casablanca… Nos acerca a la época colonial española. Varios críticos literarios han destacado el hecho de que mientras en Francia o en Gran Bretaña existía una gran tradición de literatura colonial (Malraux, Foster, Kipling...), en España apenas se ha sacado provecho de la aventura africana. Un homenaje a los hombres y mujeres que vivieron allí. Además la autora nos aproxima a un personaje real desconocido para el gran público: Juan Luis Beigbeder, el primer ministro de Exteriores del gobierno de Franco.
En 1929, el joven y avezado Jack Beilis conducía su propio automóvil, vestía trajes a medida y frecuentaba los mejores clubs de Detroit. Pero la brutal crisis que aquel año azotó América, lo arrojó, junto a millones de compatriotas, al hambre y la desesperación.
Desahuciado y perseguido por un oscuro crimen, embarcará junto a su amigo Andrew hacia la legendaria Unión Soviética, el idílico imperio en el que cualquier hombre tenía derecho a trabajar y ser feliz, sin sospechar los extraordinarios avatares que les tenía reservados el destino.
Inspirada en hechos reales, con El último paraíso Antonio Garrido funde magistralmente thriller, amor y novela histórica en la dramática epopeya de un superviviente en un mundo dividido. Un formidable fresco de una época convulsa que cambió para siempre el curso de la Historia.
Una historia descarnada sobre las angustias de un joven de nuestro tiempo. César Cálvez, «Gusanito», es un joven que se encuentra al margen. Siente que la vida le queda lejos, que lo dejó de lado. Y más ahora que lo han echado del trabajo. Los días, en el calor asfixiante de la ciudad en verano, se le van sin saber cómo. Se refugia en el balcón, en los videojuegos, en los chats. «Somos», le dice Janislyn, su brillante compañera de conversación virtual, «la escoria. Lo que quedó cuando apartaron el material bueno.» Los días pasan sin fin y se pregunta cuándo tocará fondo. Mientras hace cuentas, mientras desciende a su particular infierno, descubre facetas jamás soñadas y lentamente empieza a cruzar líneas prohibidas. En el fondo de su mente va latiendo una idea, la de reestablecer una suerte de equilibrio. Pero, contra lo que espera, acaba descubriendo que hasta los espectros pueden encontrar una tabla a la que agarrarse. Agarrado a ella, Gusanito querrá transformarse, y soñar una nueva mutación.
Una historia descarnada, sobre la soledad de quienes luchan por salir adelante cuando lo han perdido todo, un espejo de las angustias de nuestros días, del signo de los tiempos.
La novela Entre Naranjos conforma, junto a otros títulos como Arroz y tartana, La barraca o Cañas y barro, la mejor época literaria de Vicente Blasco Ibáñez. Así lo señalan los expertos en su obra, quienes definen estas novelas valencianas como las más destacadas de su producción.
La novela narra la historia de Rafael Brull, el único hijo de la familia con más poder de la pequeña localidad valenciana de Alcira. Tras la muerte de su padre, un político sin escrúpulos corrompido por el poder, Rafael decide hacerse cargo del negocio familiar - la plantación y distribución de naranjas -, así como continuar la carrera política emprendida por su padre.
Al contrario que su padre, Rafael es un hombre culto y honrado, lo que no impide que en poco tiempo se convierta en un exitoso hombre de negocios y en político. A pesar de éxito, lo único que hace feliz a Rafael es estar junto a Leonora, una enigmática cantante de ópera que, tras varios años en Italia, regresa a Alcira para curarse de las heridas del pasado. Sin embargo, el círculo conservador que rodea a Rafael se opone a esta relación porque desprecian a los artistas.